El objetivo de este blog dar a conocer nuestra experiencia como padres de un niño que nació con una hemiparesia izquierda, por si puede ayudar a otros padres que pasen por la misma situación.
En el blog vamos contando las distintas terapias que hemos aplicado a nuestro hijo, y que creemos que pueden ser de interés para otros niños.
En la parte izquierda del blog están las páginas del blog, en las que vamos contando toda nuestra historia clasificada según la edad que iba teniendo el niño. Todos los nuevos Artículos, además de estar en la página "Artículos Recientes", también los copiamos en las páginas clasificadas según la edad, para que quede de una forma mas ordenada en función de la edad del niño.

jueves, 5 de mayo de 2022

CHARLA INTENSA EN MAYO 2021

 

CHARLA INTENSA EN MAYO 2021



El viernes 7 de mayo de 2021 tuve con mi hijo otra de esas charlas intensas que tenemos a veces.

Estábamos en nuestra rutina normal de estiramientos y esta fue nuestra conversación:


Hijo: oye papá en el cole me han estado hablando del autismo (hay 2 niños con autismo en su instituto), y dicen que no es una enfermedad porque no se puede curar. Es que esos niños son así. Es lo mismo que pasa con la hemiparesia, que no es una enfermedad, que yo nací así.


Yo: Claro hijo. No es una enfermedad. Igual que los niños que van en sillas de ruedas. Tampoco es una enfermedad. Pero aunque alguna gente lo llame enfermedad no hay que enfadarse ni tomárselo mal. Es simplemente que esa gente no sabe estas cosas, pero no lo hacen con maldad.


Hijo: claro, es que no son especialistas de la hemiparesia y lo dicen de cualquier manera.


Yo: Eso es. Es como cuando dice alguien que un niño con hemiparesia no es normal. En realidad está mal dicho, pero no hay que enfadarse por eso. Todos los niños son normales. Un niño que es gordito o que lleva gafas es un niño normal. Lo que pasa que ese niño es así. Pues igual sucede con un niño con autismo, hemiparesia o en silla de ruedas. No hay nadie perfecto en este mundo. Todos somos normales pero diferentes. Cada uno tenemos nuestras características.


Incluso alguien que se crea perfecto, porque es muy guapo o muy listo, no lo será porque probablemente tenga un ego muy grande. No hay nadie perfecto en este mundo.

Tu por ejemplo, ¿crees que eres normal o no? ¿Como te sientes?


Hijo: Bueno yo creo que parece que soy normal pero que tengo hemiparesia. La gente no se da cuenta, así que es como un secreto.


Yo: ¿pero tu que piensas que no puedas hacer por la hemiparesia que si pueda hacer otro niño de tu clase o tu hermano?


Hijo: pues por ejemplo cuando juego al baloncesto, creo que se me nota mas. Boto la pelota casi siempre con la derecha y no soy tan rápido como los otros niños.


Yo: Pues si hijo, con todo el trabajo de rehabilitación que hemos hecho hemos conseguido que la gente no sepa que tienes hemiparesia. No te notan nada. Pero como tu dices se te puede notar en la coordinación o en la velocidad de respuesta al correr.

Tu eres un niño normal pero que la coordinación y la velocidad te cuesta mas que a otros niños. Pero a otros niños les costará mas otras cosas. No hay nadie perfecto. Y se puede vivir perfectamente y tener una vida normal con menos coordinación y velocidad.


Además eso es mas importante cuando eres niño, pero según te vayas haciendo mas mayor será menos importante. La gente mayor de mi edad no necesita tanta coordinación ni velocidad porque ya no jugamos al baloncesto. Nuestra vida es mas tranquila y lenta.


¿hay algo mas en lo que creas que eres diferente al resto de niños?


Hijo: No. Menos por lo de la coordinación y la velocidad, puedo hacer igual el resto de cosas que los demás. Hasta escribo con la mano izquierda.


Yo: Eso es hijo. Además haces cosas que casi ningún niño hace. Para mi eres un niño normal como lo son todos los niños, y puedes hacer todo lo que te propongas en la vida. Eres muy bueno haciendo algunas cosas y otras te cuestan mas como a todo el mundo.



Este tipo de conversaciones surgen espontáneamente con mi hijo. Al pasar tantas horas juntos por la rehabilitación van surgiendo distintos temas. El propio niño va sacando los temas según sus inquietudes, y solo hay que estar ahí para responder las preguntas que tenga.


Cuando era pequeño yo no sabía como nos íbamos a enfrentar a la adolescencia y a todos esos miedos y dudas que surgirían.


Pero no deja de sorprenderme la madurez de mi hijo. Hasta el momento está asimilando y asumiendo sus virtudes y limitaciones muy bien. Es consciente de como ha nacido y de que limitaciones tiene.