El objetivo de este blog dar a conocer nuestra experiencia como padres de un niño que nació con una hemiparesia izquierda, por si puede ayudar a otros padres que pasen por la misma situación.
En el blog vamos contando las distintas terapias que hemos aplicado a nuestro hijo, y que creemos que pueden ser de interés para otros niños.
En la parte izquierda del blog están las páginas del blog, en las que vamos contando toda nuestra historia clasificada según la edad que iba teniendo el niño. Todos los nuevos Artículos, además de estar en la página "Artículos Recientes", también los copiamos en las páginas clasificadas según la edad, para que quede de una forma mas ordenada en función de la edad del niño.

jueves, 31 de marzo de 2022

FAMILIA

 

FAMILIA

Durante el año 2016 las relaciones con mis suegros fueron cada vez mas tensas. En enero de 2017 tuvimos una reunión a petición de mis suegros para pedirme disculpas.

Después de todos estos años se habían dado cuenta de que los resultados que he obtenido con mi sistema de rehabilitación tan exigente habían sido muy buenos. Y lamentaban el no haberme ayudado e incluso haberse opuesto a mi modo de hacer rehabilitación.

Bueno, pues agradezco mucho que alguien pida perdón y sea capaz de rectificar ante evidencias objetivas. La verdad es que muy poca gente es capaz de pedir perdón y hay que valorar mucho ese gesto.

De todos modos la relación a partir de ahora supongo que será educada pero no se si se podrá llegar a recuperar la confianza. Han sido 8 años de tensiones y presiones, y casi 6 años desde la frase maldita que fue la gota que colmó el vaso y que me hizo romper todo tipo de relaciones.


Han sido demasiados años de sufrimiento extra añadido al hecho ya en si traumático de tener un hijo con parálisis cerebral. He pasado por un principio de depresión, y soy consciente que todos estos años de sufrimiento, estrés y exigencia máxima me han modificado el carácter. Ahora soy mas serio, mas gruñón. Espero en los próximos años poder rehabilitarme mentalmente y ser mas alegre como era antes.


EJERCICIO CON PESAS PARA TIBIAL ANTERIOR

 

EJERCICIO CON PESAS PARA TIBIAL ANTERIOR

El tibial anterior es uno de los músculos mas difíciles de trabajar en nuestros niños.
Después de haber estado muchos años trabajándolo estábamos muy estancados y nuestra fisio también nos recomendó introducir pesas para trabajar el tibial anterior.

Como siempre digo la decisión final de hacer una terapia o no es de los padres, pero cuando llevas tantos años con el mismo fisioterapeuta, tienes una total confianza en el y una sintonía total. O al menos ese es mi caso. Acepté sin dudarlo. Además yo también era consciente de que necesitábamos un cambio.

El invento casero que hice para poder adaptar lo que hacíamos en el fisio, fue cortar una zapatilla vieja que ya le estaba pequeña y ponerle en el talón una alcayata circular o también llamada “Hembrilla” para sujetar las pesas.

Es necesario cortar la zapatilla porque así ves los dedos del pie del niño y puedes ver si está haciendo el ejercicio correctamente.
 
 


 



DETALLE DEL SISTEMA DE POLEAS Y PESAS

 

DETALLE DEL SISTEMA DE POLEAS Y PESAS

Como creo que el trabajo con pesas y poleas es muy útil, y es necesario añadirlo a las rutinas de nuestro trabajo semanal, me autoconstruí un sistema de poleas y pesas para poderlo usar en casa.

En las clínicas de fisioterapia tienen las llamadas jaulas de poleas y pesas para tratamientos como el Therasuit que son muy caras. Ellos lo usan para infinidad de tratamientos con niños con muy distintas patologías.

Pero en nuestro caso, para un tipo de ejercicios muy concretos centrados en la hemiparesia, no es necesario construir algo tan complejo.
Con un sistema de poleas sencillito es suficiente y el coste de todos los elementos es muy barato. No llega a 15 euros.

Las pesas se pueden hacer con rellenando botellas de agua con arena. Las pesaba en una báscula de cocina para que pesasen 500 gramos cada una. Y corte una botella de lejía (la amarilla) para ir metiendo y sacando botellas de medio kilo según necesitase el ejercicio.

Además también rellené una botella grande con 2 kilos de arena, y otra con 3 kilos de arena. Así iba colocando distintas botellas en función del peso que necesitase.

Este es un vídeo de detalle de como se sujeta a la pierna del niño, y como son las poleas:
 
 



 




EJERCICIOS CON PESAS

 

EJERCICIOS CON PESAS

En mayo de 2017 nuestra fisioterapeuta nos propuso empezar a hacer ejercicios con pesas y poleas. Mi hijo tenía en ese momento 9 años.
Llega un punto que si el niño está muy trabajado, se produce un estancamiento, y nosotros habíamos llegado a ese punto. Para seguir avanzando era necesario otro paso mas.

Como siempre hacemos con todas las terapias, hay que comenzar muy poco a poco e ir aumentando de forma progresiva y muy lenta.

Estos son los 3 primeros ejercicios con los que comenzamos:
 

 

















De cada ejercicio hacíamos 3 series de 30 repeticiones cada serie, con descansos de entre 30 y 60 segundos.


REVISIÓN MÉDICA

 

REVISIÓN MÉDICA

En marzo de 2017 fuimos a la revisión médica anual. Actualmente ya solo vamos una vez al año al médico rehabilitador infantil. En esta ocasión era una médico nueva respecto del año anterior, y volvimos a tener que pasar por la rutina y los temas de siempre.

Es sorprendente como tienen un discurso aprendido y lo aplican casi independientemente de quien tengan delante. En una cita de 15 minutos y casi sin escuchar nuestra historia y nuestro punto de vista, se atrevió a indicarnos las recetas estándar que no coinciden con lo que nosotros pensamos: uso solo de una dafo en el pie afectado, necesidad de aplicar toxina, que deberíamos hacer terapia restrictiva, etc.

Es decepcionante lo mediocre que es el sistema médico en el tema de rehabilitación de niños con hemiparesia infantil. Son como un rodillo que aplica las mismas recetas a todos los niños sin importar las particularidades de cada niño.

Nosotros no estamos totalmente en contra de la toxina, pero hay que ver cada niño individualmente para ver si lo necesita o no. Si estamos en contra de la aplicación sistemática de la toxina a todos los niños. Y en nuestra opinión nuestro hijo de momento no la necesita.

Respecto a las dafo, en el caso de nuestro hijo hemos comprobado que anda mejor con 2 dafos que con una. Y se lo argumentamos a la médico, y no supo rebatir nuestra argumentación con datos objetivos. Tenía un discurso aprendido que creo que realmente no había reflexionado e interiorizado. Su argumento era casi del tipo eso se hace porque siempre se ha hecho así. Al final de la conversación, como ya no sabía que responder, acabó diciendo: “bueno la verdad es que nunca se ha hecho un estudio médico serio respecto a poner dos dafos a un niño. Igual en un futuro si es una posibilidad cuando se estudie”.

Pues lo siento, pero nosotros no vamos a esperar a que alguien se le ocurra la feliz idea de hacer ese estudio.

Y ya el colmo es recomendar a alguien que haga terapia restrictiva, cuando lleva casi 8 años haciéndola de forma intensiva. Por lo que conocemos, mi hijo debe ser de los niños que mas terapia restrictiva ha hecho de toda España, si no el que mas. Igual sería buena idea primero evaluar al niño, escuchar su historia personalizada, y luego sugerir que terapias se deberían hacer.
En fin, tiempo perdido, y visita decepcionante. Y como en esta ocasión fue mi mujer, que últimamente no se calla, y que además es médico y le puede rebatir sus argumentos, pues hubo cierta tensión en la visita.

Cuando voy yo, ya prefiero no decir nada porque estoy convencido de que no van a cambiar su forma de pensar y el enfrentamiento no sirve para nada.
También tengo que decir que nos hemos encontrado otros médicos mas flexibles, que escuchan y valoran las individualidades de cada niño. Pero por nuestra experiencia son minoría.


DE 9 A 10 AÑOS. RUTINAS DE REHABILITACIÓN MARZO 2017

 

DE 9 A 10 AÑOS

 

RUTINAS DE REHABILITACIÓN MARZO 2017

En marzo de 2017, cuando mi hijo tenía 9 años, nuestras rutinas de rehabilitación eran las siguientes:

- SESIÓN A - una tarde hacíamos estiramientos (unos 20 minutos) y después ejercicios tipo pilates (unos 40 minutos). Después hacíamos también ejercicios de mantenimiento un poco mas aeróbicos que el pilates (del estilo de la gimnasia de mantenimiento que se hace en los polideportivos para gente adulta)(unos 30 minutos). Además hacemos también unos 5 minutos de elíptica. En total una hora y media aproximadamente.

- SESIÓN B - La siguiente tarde hacíamos 20 minutos de estiramientos. Después una hora y 10 minutos en la cinta de andar a varias velocidades y en distintas posiciones. En esta época hacíamos 3 series corriendo a 8 o 8,5 km/h. Todo esto sin agarrase a la máquina. Cada serie de 5 minutos de duración. Además otra serie agarrándose a la máquina que comenzaba con 1 minuto a 11,5 km/h, después otro minuto a 13,5 km/h, y por último 10 segundos a 13,5 km/h pero sin agarrarse a la máquina. En total recorríamos unos 5 o 5,5 km. La serie de andar hacia delante la hacíamos a 3,5-4 km/h, andar de lado a 3 km/h y para atrás a 2,5-3 km/h. Además también hacemos unos 8 minutos de stepper. En total se nos va la sesión a 2 horas de duración entre ir al baño, cambio de aparatos, merendar y demás.

- Vamos alternando la sesión A y la B. Un día hacemos la A y al día siguiente la B, luego de nuevo la A. Normalmente hacemos estas sesiones lunes, miércoles, jueves, viernes, sábado y domingo. El martes es el día que vamos al fisio de 15:00 a 16:00. Normalmente el sábado por la tarde y el domingo por la mañana no hacemos ya rehabilitación. Si algún fin de semana también perdemos alguna sesión por algún evento social-familiar, intentamos recuperarla otro fin de semana haciendo un intensivo. Solemos hacer un fin de semana intensivo una vez al mes. Ese fin de semana hacemos por ejemplo sesión A el sábado por la mañana, la sesión B el sábado por la tarde y la sesión A en domingo por la tarde. Es decir, solo perdemos el domingo por la mañana.

- En esta época mi hijo suele merendar fruta troceada o alguna galleta y leche, y se lo voy dando en los pequeños descansos que vamos teniendo durante las sesiones.

- Además de las sesiones A y B, solemos estirar 15-20 minutos antes de dormir por la noche.

- También vamos 1 o 2 veces con la bicicleta a la semana si el tiempo lo permite. Suele ser los martes sobre las 17:30 después del fisioterapeuta y los sábados por la mañana sobre las 11:30. Hacemos unos 5-6 km en una hora aproximadamente. Algún día cambiamos las bicicletas por los patines.

- Nuestra rutina de horarios es la siguiente:
  • A las 14:00 los niños salen del cole y se van a casa a comer.
  • A las 15:30 empiezan a dormir la siesta
  • A las 16:45-17:00 se despiertan de la siesta, y para que se desperecen les dejamos que vean un poco la tele tumbados en nuestra cama (la tele siempre en inglés).
  • A las 17:30 empezamos la sesión A o B. La sesión A suele durar hasta las 19:00 y la B hasta las 19:30.
  • A las 19:30 empezamos a hacer deberes si tienen.
  • A las 20:00 tienen juego libre.
  • A las 21:00 cena.
  • A las 21:45 estiramientos.
  • A las 22:00 cepillarse dientes, pijama y leer cuentos.
  • A las 22:45 dormir.
Intentamos ajustar bastante los horarios pero según los días se nos pueden ir 15 minutos arriba o abajo.

Las sesiones de los sábados o domingos por la mañana suelen ser de 9:00 a 11:00. Mis hijos se suelen despertar a las 8:00-8:30, les dejamos 30 minutos viendo tele para desperezarse y después empezamos rehabilitación.

martes, 29 de marzo de 2022

CAMBIOS DE CRITERIOS MÉDICOS

 

CAMBIOS DE CRITERIOS MÉDICOS

En la jornada técnica organizada por Hemiweb el 3 de diciembre, una de las charlas fue sobre epilepsia.
Y se hizo un comentario sobre que hace años se daban muchas pastillas a los niños para que no tuviesen prácticamente crisis epilépticas, pero los adormecían en exceso. Comentaron que ahora la tendencia era darles menos medicación aún a riesgo de que tuviesen alguna crisis esporádica.

Ese comentario me hizo pensar sobre los cambios de criterios médicos que existen.
Algo que era válido hace unos años, ahora no lo es. Y nos dicen que lo bueno ahora es otra terapia como si fuese una verdad absoluta. Pero siguiendo ese mismo razonamiento, nadie nos puede asegurar que alguien en un futuro nos diga que lo que hacemos actualmente sea erróneo, porque la tendencia en ese futuro es otra distinta.

Durante estos años he conocido profesionales (médicos, fisioterapeutas, terapeutas ocupacionales, psicólogos) con distintos criterios y opiniones sobre temas como: Vojta, terapia restrictiva, rehabilitación intensiva, tóxina botulínica, cirugías de alargamiento, hormona del crecimiento, tartamudez, epilepsia, método Doman, etc.
Incluso he conocido profesionales que cambian su criterio respecto a un tema a los largo del tiempo. Por ejemplo, en el año 2009 cuando empezamos a aplicar la terapia restrictiva, la mayoría de profesionales estaban en contra. La verdad es que no se muy bien en que basaban sus opiniones porque no tenían ni experiencia ni conocimiento suficiente sobre esa terapia en ese momento. Ahora, en el año 2017 parece que está de moda la terapia restrictiva y si hay muchos profesionales a favor.
Es como para volverse loco, y es normal que los padres estemos confusos y no sepamos que es mejor ni peor.

Mi opinión es que no hay verdades absolutas. Y que desgraciadamente en este mundo nuestro de la rehabilitación de la hemiparesia infantil la mayoría de las veces son verdades relativas. Ojala hubiese una pastilla mágica perfecta, o fuese todo tan exacto como las matemáticas, pero no es así.

Como ya he comentado otras veces, creo que es responsabilidad de nosotros, los padres, es estar muy bien informados y tomar ese tipo de decisiones.
Nosotros así lo hemos hecho hasta el momento incluso llegando a enfrentarnos a médicos.

Afortunadamente mi hijo de momento no tiene crisis epilépticas. Pero nunca se sabe si nos tocará también. Si algún día llega ese momento, nos tendremos que formar e informar muchísimo sobre ese tema, porque estoy convencido que al final seremos nosotros los que tendremos que asumir la responsabilidad de que dosis de medicación tendrá que tomar nuestro hijo.

Y por supuesto asumir las consecuencias de tal decisión. Por eso es tan difícil asumir ese tipo de responsabilidades, pero creo que aunque sea duro debemos ser los padres los que asumamos ese tipo de responsabilidad.

ENCUENTRO FAMILIAS HEMIWEB

 

ENCUENTRO FAMILIAS HEMIWEB

El 3 y 4 de diciembre de 2016 tuvo lugar el segundo encuentro de familias y jornada técnica sobre hemiparesia organizado por Hemiweb.
Al primer encuentro del año 2014 no pudimos asistir, pero a este si que fuimos y la verdad es que nos encantó.

El primer día fueron unas charlas técnicas. La verdad es que están mas dirigidas a los padres novatos que empiezan en este mundo, pero bueno siempre aprendes algo nuevo.
En mi caso me gustó la parte de nuevas aplicaciones informáticas orientadas a la rehabilitación. Vienen bien estas jornadas para actualizarse un poco sobre nuevas terapias y tratamientos, y para los padres novatos creo que son excepcionales.

Pero los que de verdad disfrutaron, y es que son realmente los protagonistas, fueron los niños. Los niños tenían organizados unos talleres y actividades con monitores, y al menos los míos se lo pasaron muy bien.
El segundo día fue un encuentro de familias en un museo interactivo. También estuvo muy bien. Pudimos contactar y hablar con otros padres, y los niños también se lo pasaron muy bien.
Vamos que nos encantó ese fin de semana y esperamos repetir.

Desde aquí quiero agradecer a las personas responsables de Hemiweb todo ese trabajo, esfuerzo y energía que dedican por el bien común, que nunca es suficientemente agradecido. Muchísimas Gracias.

PROGRAMA INTENSIVO EN NAVIDADES

 

PROGRAMA INTENSIVO EN NAVIDADES

En diciembre de 2016 repetimos el programa intensivo de terapia restrictiva en casa. Igual que el año anterior, le inmovilizamos de forma permanente la mano no afectada durante unos días. En esta ocasión inmovilizamos del 25 de diciembre al 28 de diciembre. El 28 por la tarde le quitamos la restricción porque teníamos una actividad fuera de casa. Se la volvimos a poner el 29 por la mañana y se la quitamos el 31 de diciembre por la tarde. Se la volvimos a poner el día 1 de enero, se la quitamos el 2 de enero por la tarde. La pusimos de nuevo el 3 por la mañana y se la quitamos definitivamente el 5 de enero por la tarde.

En definitiva, si teníamos algún evento o actividad con familiares o amigos, le quitábamos la restricción porque notamos que el niño no se encontraba a gusto porque la gente le mira y pregunta. El resto del tiempo en casa mantenemos siempre la restricción puesta porque cuando estamos solos acepta la restricción bien.

Este año tomamos esa decisión porque nos dimos cuenta que al menos en el caso de mi hijo, los avances ya no son tan significativos y no compensa hacer ese sacrificio extra.

Como el año anterior, todos los ejercicios son juegos y actividades que se realizan con su hermano y su madre. El niño se lo toma como un periodo de descanso de la rehabilitación diaria que hace conmigo el resto del año, y nos sirve para descansar mutuamente uno del otro.

Además le sirve para reafirmar que puede usar esa mano para lo que desee, y que es capaz de hacer casi cualquier cosa con ella.

DEBERES DEL COLEGIO

 

DEBERES DEL COLEGIO

En diciembre de 2016 mi hijo va a tercero de primaria, y al menos en España, ya le mandan deberes del colegio que tiene que hacer casi todas las tardes en casa. Todos los familiares y amigos que conocemos están en situaciones parecidas. Los niños de 8 años o mas se pasan al menos una hora al día haciendo deberes o estudiando por las tardes en casa. Yo no recuerdo haber estudiado o haber hecho deberes de forma sistemática y continuada hasta que por lo menos tenía 15 o 16 años. Y creo que soy una persona que ha estudiado bastante en su vida, pero de los 15 a los 25 es cuando estudié de forma intensa. Y creo que los niños de aquella generación no salimos mal del todo.

Se que es un tema de mucho debate y controvertido, pero personalmente creo que los niños de 5 a 14 años deben estar mas tiempo jugando y sociabilizando con otros niños que haciendo deberes. Eso es una opinión personal respecto a la educación de cualquier niño basada en mi experiencia y educación, pero respeto que cada padre pueda tener opinión diferente.

Pero si nos centramos en nuestros hijos con hemiparesia la cosa se complica un poco mas. Mi hijo ya tiene muy poco tiempo libre porque dedicamos mucho tiempo a la rehabilitación, y si además le tengo que quitar ese tiempo libre para hacer deberes prácticamente no tendría tiempo para jugar.
Actualmente, empezamos la rehabilitación después de la siesta sobre las 17:15-17:30. Y acabamos sobre las 19:15-19:30. Después hacemos media hora de deberes y sobre las 20:00 juegan una hora hasta las 21:00 que cenan.

Me niego a hacer mas de media hora de deberes porque se lo quitaría de tiempo de juego, y porque creo que ya es demasiado para un niño de esa edad, aunque la mayoría de los días los profesores le mandan casi una hora o mas de deberes. Lo solucionamos ayudándole si hay que pintar algún mapa, no copiando enunciados de ejercicios aunque hubiese que copiarlos o incluso dejando algún ejercicio para hacerlo otro día.

Y eso que el tiempo que hacemos deberes los hacemos con la mano afectada y forma parte de la rehabilitación. Pero creo que con la edad que tiene mi hijo es necesario que tenga un tiempo de ocio libre.

Además uno de los argumentos de defensa de los deberes diarios en niños pequeños es que vayan adquiriendo rutinas de trabajo. Pero en el caso de mi hijo eso ya lo tiene y en exceso debido a la vida de rehabilitación que llevamos. Precisamente lo que necesita es tener menos rutinas, juegos, libertad, locura, hacer travesuras y trastadas.....en fin ser un niño.

Como ejemplo diré que a mi hijo ya le ponen notas, y suele sacar entre 7 y 9, que me parecen unas notas estupendas. Se que hay otros padres que exigen mucho académicamente a sus hijos para que saquen todo 9 y 10, pero en nuestro caso, creo que la rehabilitación, la sociabilización y el juego, para esta edad de mi hijo son mas importantes de momento.

EQUILIBRIO Y ANDAR A PATA COJA

 EQUILIBRIO Y ANDAR A PATA COJA


Uno de los ejercicios que me parece fundamental para el fortalecimiento de la pierna afectada es mantener el equilibrio a la pata coja con la pierna afectada sujetando el peso. Al principio ni hijo solo aguantaba medio segundo a la pata coja, pero a base de practicar según fueron pasando los meses fue cogiendo mas fuerza en la pierna. En diciembre de 2016 después de varios años haciendo ese ejercicio mi hijo, su record está en un minuto aguantando en equilibrio sobre la pierna afectada. Aunque lo normal es que hagamos 3 tandas de unos 20 segundos.





Cuando la pierna se ha fortalecido suficiente aguantando en equilibrio se puede pasar a la siguiente etapa que es andar a la pata coja.
La primera vez que lo intentamos mi hijo no era capaz ni de dar un paso, y como muchas veces me parecía imposible que pudiese conseguir ese reto. Además era muy frustrante para el que su hermano pequeño si podía.
Como me gusta intentar todo aunque parezcan cosas imposibles, integré un ejercicio de andar a la pata coja dentro de la serie de ejercicios que hacíamos.
Al principio es mejor hacerlo en calcetines porque es mas fácil, ya que mas que andar o saltar a la pata coja, lo que hacen es medio resbalar. Y también al principio hay que sujetarles de las manos para darles una ayuda a que puedan mantener el equilibrio.
Cuando ha pasado un tiempo en lugar de sujetarles nosotros de las manos es mejor que se apoyen ellos solos en una pared para ir avanzando, y según van mejorando ya no se deben apoyar en nada. 
 
 

 



Como todo lo que hacen nuestros hijos es un proceso lento de aprendizaje, dura muchos meses e incluso años, pero con mucha paciencia se consigue.
Aunque ya llevamos mas de 8 años en este mundo de la rehabilitación, cuando veo el vídeo de como mi hijo consigue andar a la pata coja todo ese tiempo seguido aún me emociono de los milagros que pueden conseguir estos niños. ¡¡¡Son unos campeones!!!.
Ahora echa carreras a la pata coja con su hermano en igualdad de condiciones.

De momento solo lo hemos hecho dentro de casa y con calcetines que es mas fácil.
Nuestro próximo reto sera hacerlo con zapatillas y en la calle en superficies mas irregulares y rugosas como aceras o carreteras, en los que los saltos tienen que ser un poco mayores para evitar esas irregularidades.




EVALUACIÓN DE 8 AÑOS DE REHABILITACIÓN

 

EVALUACIÓN DE 8 AÑOS DE REHABILITACIÓN

En noviembre de 2016 mi hijo tiene casi 9 años y 8 de ellos han sido de rehabilitación.
Si miro atrás en perspectiva y veo como han sido todos estos años, la verdad es que estamos mucho mejor de lo que esperaba. Yo pensé que mi hijo nunca gatearía, y por supuesto nunca llegué a imaginar que podría jugar a la playstation en igualdad de condiciones que otros niños.


El diagnostico de la hemiparesia de mi hijo cuando tenía 9 meses no fue de una hemiparesia leve. Fue de una hemiparesia moderada, aunque también es cierto que no era grave. Pero al principio nos costó muchísimo que lograse movilidad. Con 11 meses prácticamente no tenía movilidad, y desde esa edad hasta los 3 años el cambio fue grandísimo.

Recuerdo perfectamente que pensé que mi hijo nunca llegaría a hacer cosas que ahora si puede como gatear, jugar a la playstation, montar en bicicleta o jugar a correr con sus amigos del colegio.
Tenía serias dudas de como se iba a ganar la vida mi hijo cuando fuese adulto con la minusvalía que tiene o de si conseguiría tener pareja y relacionarse emocionalmente y socialmente bien. En definitiva si podría llevar una vida como el resto de las personas.

Por lo vivido hasta ahora he de decir que se han superado mucho mis expectativas.
Hasta el momento mi hijo esta integrado perfectamente con sus amigos del colegio, sin ningún tipo de discriminación, es más desconocen que tiene una hemiparesia porque no es evidente. Tienes que ser un especialista para detectarla. Es cierto que cojea un poco y es mas descoordinado por ejemplo que el resto de niños, pero la diferencia es tan pequeña que no provoca un rechazo en el resto de los niños.

Por ejemplo juega como uno mas al fútbol o a correr, aunque no es de los que mejor juegan o corren, pero tampoco es el peor. Hay niños gorditos o muy bajitos de su clase que están en mas desventaja física que el. Por poner un ejemplo, cuando los niños juegan al fútbol y los dos niños que mejor juegan hacen los equipos eligiendo al resto de niños, mi hijo no es el último al que eligen. Si son 10 niños en cada equipo, igual le eligen el sexto o séptimo. Yo nunca pensé que pudiese jugar al fútbol con el resto de niños en igualdad de condiciones y que encima no fuese al ultimo que eligiesen. La verdad es que me emociono solo de pensarlo y escribirlo ahora.

Lo de jugar a videojuegos ha sido como un milagro. Hoy en día los niños sociabilizan mucho jugando a videojuegos. Nosotros invitamos a amigos del colegio a jugar en casa a videojuegos, y ellos invitan a mi hijo a que vaya a sus casas, y juega “como uno mas” literalmente. No existe ninguna diferencia entre el resto de niños y mi hijo cuando juegan a videojuegos.

En resumen llevamos 8 años de rehabilitación intensiva en casa que han sido duros, pero los resultados han superado las expectativas que teníamos en un principio.

VACACIONES VERANO 2016

 

VACACIONES VERANO 2016

En el verano de 2016 ya no hicimos intensivo de rehabilitación. Seguimos la rutina de rehabilitación normal que habíamos seguido durante todo el año, pero al no tener los niños colegio, tenían mas tiempo libre para juego libre. Tampoco usamos tanto el guante restrictivo ya que muchos de los juegos eran bimanuales o en la piscina. 
Nos fuimos dos semanas de vacaciones y el resto del tiempo lo pasamos en casa. Poco a poco según pasan los años y según habíamos planificado, vamos relajando la rehabilitación intensiva y llevando una vida un poco mas normal.

FISIOTERAPEUTAS

 

FISIOTERAPEUTAS

Durante los últimos años íbamos los martes a dos fisioterapeutas. A uno de 15:00 a 16:00, y al otro de 16:30 a 17:30. Ese día los niños duermen una media hora de siesta en el coche en el viaje. El resto de la tarde la solíamos dedicar a ir a ver a los abuelos.
En septiembre de 2016 decidimos ir solo a un fisioterapeuta de 15:00 a 16:00. 
Después volvíamos a casa y dedicábamos la tarde a ir con la bici (unos 5 km), ir a patinar, ir a correr por la calle o jugar un poco al badminton.
Tomamos está decisión por tener un poco mas de tiempo libre para hacer deportes lúdicos.

DE 8 A 9 AÑOS. RUTINAS AÑO 2016

 

DE 8 A 9 AÑOS

 


RUTINAS AÑO 2016

En el año 2016 mi hijo tenía 8 años. Nuestras rutinas de rehabilitación eran las siguientes:

- Los martes íbamos al fisio, aunque a partir de septiembre de 2016, ya solo íbamos a un fisioterapeuta.
- Los sábados por la tarde nos los tomábamos libres.
- Los domingos por la mañana íbamos a catequesis y misa.
- Los lunes, jueves y sábados por la mañana estirábamos unos 20 minutos, después hacíamos 3 minutos de elíptica, después hacíamos 60 minutos de cinta de andar y 5 minutos de stepper. En total entre tiempos muertos tardábamos unas dos horas.
- Los miércoles, viernes y domingos por la tarde estirábamos y hacíamos pilates. En total una hora y media aproximadamente.

Nuestra rutina de diario es que los niños van al colegio de 9:00 a 14:00, después van a casa a comer. Nos echamos siesta de 15:30 a 16:45. Y a las 17:15 empezamos la rehabilitación. Depende del día, solemos acabar rehabilitación entre las 19:00-19:30.
De 19:30 a 20:00 hacemos deberes del colegio. De 20:00 a 21:00 tienen un rato de juego libre los niños. De 21:00 a 23:00, cena, ducha, leer cuentos y acostarse.

jueves, 24 de marzo de 2022

PROGRAMA INTENSIVO DE TERAPIA RESTRICTIVA EN CASA

 

PROGRAMA INTENSIVO DE TERAPIA RESTRICTIVA EN CASA

En diciembre de 2015, aprovechando las vacaciones de navidad, decidimos hacer un programa intensivo de terapia restrictiva en casa.
La idea era hacer un programa similar al que hacen en la universidad de Columbia de Nueva York o en otros programas parecidos.
Estos programas incluyen unas 5 o 6 horas diarias de trabajo con terapeutas de lunes a viernes durante 3 semanas. Durante las tardes y los fines de semana, los padres deben hacer ejercicios extras con sus hijos.
Nosotros decidimos hacer 6 horas de trabajo diarias 6 días a la semana. Y el día restante de la semana hacer 3 horas de trabajo por la mañana y por la tarde libre.

Al niño se le pone en la mano no afectada una férula rígida durante 24 horas durante 3 semanas. La férula también la hicimos nosotros mismos con un material plástico muy ligero que al mojarse en agua caliente se puede moldear, y cuando se seca se endurece. La verdad es que los materiales plásticos moldeables han avanzado mucho en los últimos años. Cada semana le quitábamos la férula para ver que la piel del brazo estuviese bien, y aprovechábamos para dar una ducha al niño sin férula. E inmediatamente después de la ducha le poníamos una férula nueva. También dábamos una ducha al niño a mitad de semana con la férula puesta y una bolsa de plástico para no mojarla. Lo bueno es que era invierno y el niño estaba en casa todo el día, y con dos duchas a la semana era suficiente.

De las 6 horas de trabajo diarias decidimos hacer 3 horas por la mañana, y 3 horas por la tarde para que el niño estuviese mas descansado en cada sesión. 6 horas seguidas de trabajo nos parecían excesivas, y una ventaja de hacer la terapia en casa es que nos podíamos organizar los horarios como nosotros quisiésemos.

Nuestros horarios y rutinas de trabajo eran las siguientes:
- de 9:00 a 9:30 - estiramientos y movilización general de los músculos realizada por mi.
- de 9:30 a 12:30 – sesión de trabajo de terapia restrictiva realizada por mi mujer.
- de 12:30 a 14:00 - los niños tenían juego libre
- de 14:00 a 15:00 – comida.
- de 15:00 a 17:00 – siesta
- de 17:00 a 17:30 – los niños ven un rato la tele mientras se desperezan de la siesta.
- de 17:30 a 20:30 – sesión de trabajo de terapia restrictiva realizada por mi mujer.
- de 20:30 a 21:40 - tiempo de juego libre y cena. Los niños van cenando y jugando a la vez. En la cena no les obligamos a estar sentados en la mesa para aprovechar mejor el tiempo.
- de 21:40 a 22:00 – estiramientos realizados por mi.
- de 22:00 a 23:00 - lavarse los dientes, ponerse el pijama y leer un cuento
- 23:00 – dormir

Hicimos un calendario para planificar las sesiones de trabajo de las tres semanas. Cada sesión de trabajo de cada día tenía asignado unos juegos o ejercicios específicos para trabajar distintos movimientos. Los juegos y ejercicios eran distintos cada día. Todos los ejercicios los hacían mis dos hijos juntos con mi mujer a modo de juego. La percepción de los niños es que pasaban las horas jugando con su madre.

En el juego libre, los niños no estaban tan dirigidos, y podían jugar libremente. Aunque mi hijo seguía llevando la férula restrictiva, así que seguía trabajando de manera indirecta. El juego libre lo dedicaban a jugar con los coches, a juegos de construcción (Lego), con muñecos (playmobil), fútbol, patines, wii con juegos que se podían jugar con una mano, etc.
Siempre tenía que haber un padre un poco cerca por si necesitaba ayuda para alguna actividad.

Estoy escribiendo este articulo cuando ya han pasado casi dos meses desde que acabamos el programa, y creo que puede ser el momento de analizar las ventajas e inconvenientes, y los resultados.
En cuanto a los resultados, la verdad es que mi hijo no ha notado una gran mejora en la movilidad de su mano izquierda (afectada). Por otra parte ya esperábamos estos resultados, ya que nosotros llevamos aplicando la terapia restrictiva durante 6 años y medio de forma intensiva, y los resultados mas espectaculares se consiguen al principio. Nosotros casi ya estamos llegando al límite de nuestro potencial de mejora. Casi estamos tocando techo, y por lo tanto nuestros avances son mas pequeños.
Según los estudios hechos por las universidades americanas, con el programa intensivo de 3 semanas los niños pueden llegar a conseguir hacer la pinza o señalar con el dedo índice.

Las ventajas que hemos detectado nosotros para nuestra familia, es que durante esas 3 semanas mi hijo y yo hemos descansado mutuamente el uno del otro sin perder rehabilitación. Normalmente soy yo el que pasa mas horas con el trabajando y nos ha venido muy bien a los dos este descanso. Además desde la perspectiva del niño han sido todo juegos con su hermano y su madre, y no ha tenido la sensación de que estaba haciendo rehabilitación. Es mas, el decía que en navidades no había hecho rehabilitación, que estaba de vacaciones. El considera la rehabilitación todos los estiramientos, fisioterapia, cinta de andar y ejercicios que hace conmigo diariamente.

Además durante este tiempo de descanso mutuo, ha sido aprovechado para trabajar intensivamente la mano. Y le ha servido para darse cuenta de que puede hacer prácticamente cualquier actividad con la restricción puesta. Que su mano izquierda puede hacer cualquier cosa. Por ejemplo en nuestra vida diaria se lava los dientes con la mano derecha (no afectada), pero esas semanas se los lavo con la izquierda sin ningún problema.

Como inconvenientes, evidentemente la perdida de tiempo de ocio y las presiones familiares. Mi hijo en casa no tiene ningún rechazo a la férula, pero cuando tuvimos que ir a algún festejo familiar como Nochebuena o Nochevieja, si detectamos que el niño tenía rechazo y no quería ir con la férula. Creo que es por la actitud de la gente hacía el. Aunque son familia y amigos y se lo hemos explicado, muchos de ellos transmiten una energía negativa, que los niños perciben inmediatamente. Decidimos explicárselo a la familia por adelantado y decirles que no le preguntasen nada a el directamente. Que todas las preguntas que tuviesen nos las hiciesen a nosotros. Aún así algún familiar le preguntó. Como curiosidad, los niños que fueron a esas reuniones no le preguntaron nada. Los niños llegan y juegan, no hacen interrogatorios de si alguien lleva una ferula, gafas, etc. La parte positiva es que a mi hijo le sirvió para superar esos miedos. Ver que al final todo salió bien, y que no pasaba nada por ir con la férula. Un reto mas superado.

PROGRAMA INTENSIVO DE TERAPIA RESTRICTIVA EN NUEVA YORK

 

PROGRAMA INTENSIVO DE TERAPIA RESTRICTIVA EN NUEVA YORK

En el verano de 2009, cuando empezamos a investigar sobre la terapia restrictiva, contactamos con la universidad de Columbia de Nueva York, que eran pioneros en la investigación de la terapia restrictiva, y realizaban un programa experimental de terapia restrictiva intensiva con una restricción total durante 3 semanas. Durante esas 3 semanas hacen unas 6 horas diarias de rehabilitación (de 9:00 a 15:00) de lunes a viernes. También mandan ejercicios para que los padres hagan en casa por las tardes y los fines de semana. Al final de ese periodo de 3 semanas median los resultados obtenidos, y sacaban conclusiones sobre si la terapia restrictiva es eficiente o no. También hay que volver a los 6 meses para hacer otra valoración. Fueron los inicios de todos los estudios que se han ido desarrollando estos años.
Nos apuntamos al programa, y nos pusieron en lista de espera.

Mientras tanto, y como no nos íbamos a quedar esperando con los brazos cruzados, fuimos investigando y experimentando por nuestra cuenta con lo expuesto en este blog.
En abril del 2015, la universidad de Columbia se puso en contacto con nosotros por si seguíamos interesados en participar en el programa de investigación. Se comenzaría a finales de junio de 2015, y tendríamos que estar en Nueva York durante casi 4 semanas. Además deberíamos volver a los 6 meses para analizar los resultados.

En el programa de la universidad de Columbia, las sesiones de rehabilitación realizadas por los terapeutas son gratuitas, pero te tienes que pagar el viaje y la estancia. Además no facilitan ningún contacto o residencia de estudiantes en la que puedas alojarte aunque sea pagando. Tienes que buscarte la vida. Un hotel en el centro de Nueva York durante un mes es inasumible para nosotros. La única opción económicamente viable sería una habitación en un piso compartido con desconocidos adultos. Desde luego no es el ambiente ideal para un niño. Les propuse si podían coordinar que varios niños del programa estuviesen en el mismo piso alquilado, pagándolo nosotros, pero tampoco hacían ese tipo de gestión o coordinación. En coste aproximado del viaje, estancia, comidas, y la revisión a los 6 meses, sería de unos 10000 euros.

La verdad es que en ese momento, ya no era una urgencia para nosotros como en el año 2009 que estábamos casi desesperados. En el año 2015 ya eramos especialistas en terapia restrictiva, y nuestro hijo estaba bastante rehabilitado. Pero siempre nos interesa probar cosas nuevas y ayudar en lo posible en la investigación y mejora de terapias.
Le comentamos a nuestro hijo que le parecía participar en el programa, y tuvo un rechazo total. Además dada ya la cercanía del verano, nos era muy complicado organizarnos en el trabajo para tener esos días libres. Así que después de pensarlo mucho, tuvimos que decirles que no podíamos participar en el programa en junio de 2015.

En septiembre de 2015, se volvieron a poner en contacto con nosotros, por si estábamos interesados en participar en junio de 2016. Y teniendo casi un año por delante, poder organizar bien toda la logística del viaje y en el trabajo. Además el niño sería mas mayor, y no tendría tanto rechazo.
Creo que les interesa bastante saber como funcionaría el programa intensivo de 3 semanas, en un niño tan trabajado como mi hijo. Y a nosotros también por supuesto.
Estuvimos un par de semanas dándole vueltas al asunto para tomar una decisión. A modo de resumen estas son las ventajas e inconvenientes de ir a Nueva York que valoramos:

Ventajas

- Realizar una rehabilitación intensiva de la mano durante 3 semanas con una restricción total. Cosa que aún no habíamos probado. Aunque nosotros ya eramos especialistas y podíamos realizarlo por nosotros mismos.
- Que mi hijo aprendiese inglés. Aunque hay otras opciones para hacerlo, se podía aprovechar la ocasión.

Inconvenientes

- Creo que sería una experiencia muy estresante para mi hijo. Vivir en una casa con adultos desconocidos. Estar solo todas las mañanas haciendo rehabilitación con desconocidos y además hablando en ingles. No permiten estar a los padres en las sesiones. Estar desvinculado de su hermano y madre (en principio iría yo con el), y sin tiempo casi de ocio, ya que la mayor parte del tiempo por las tardes y fines de semana hay que dedicarlos a hacer ejercicios. Creo que ese estrés no sería bueno para el, y le podría afectar en el habla.

- Falta de atención hacia mi otro hijo. Mi otro hijo se quedaría sin su hermano durante un mes, y tienen una relación muy estrecha. Además pasaría gran parte del tiempo solo en algún campamento de verano o con los abuelos. Tiene un sentimiento de que dedicamos mas tiempo y energía a su hermano, y este sentimiento se vería reforzado. Y últimamente estamos trabajando precisamente en el sentido contrario porque hemos detectado esa carencia afectiva suya.

- Muchas dificultades para organizarnos en el trabajo justo en esas fechas de finales de junio. Para nosotros son probablemente las peores de todo el año, y no tienen fechas alternativas.

- El dinero. Unos 10000 euros gastados en un mes es mucho dinero. Aunque esté no sería el inconveniente principal, porque nosotros creemos que si es útil y necesario, hay que invertir ese dinero. Para eso sirve el dinero y se saca de donde sea. No hay mejor dinero que el bien gastado en la rehabilitación de nuestro hijo.

Después de pensarlo y valorarlo mucho, tuvimos que declinar amablemente la invitación a participar en el programa. Los inconvenientes superaban por mucho a las ventajas. Para nosotros fueron decisivos sobre todo para tomar una decisión, el tema del estrés del niño y la desvinculación familiar que sufriríamos, sobre todo su hermano.

Creo que el programa está pensado sobre todo para niños que viven en Nueva York. Para niños de fuera no ponen demasiadas facilidades. Aunque según me dijeron casi la mitad de los niños eran de fuera de Nueva York. Creo que tratando con niños tan pequeños es también muy importante cuidar el entorno en el que se van a mover y no solo la rehabilitación. Si gestionasen algún tipo de piso o residencia compartida con los otros niños que participan en el programa (aunque fuese pagando) en la que además pudiesen ir hermanos, facilitarían mucho mas un entorno familiar, amigable y menos estresante para los niños. Además los niños podrían seguir haciendo rehabilitación juntos por las tardes y fines de semana.

Creo que hay que ayudar en lo posible a los demás, y en este caso a una investigación a mi me parece muy útil. Pero en este caso el coste emocional de proporcionar esa ayuda era inasumible por nosotros. Estábamos dispuestos a asumir el coste económico que ya era muy elevado para nosotros, pero no el emocional que era muy grande para mis hijos.

Pero después de habernos planteado muy seriamente la opción de ir a Nueva York para realizar un programa intensivo de 3 semanas, nos quedamos con las ganas de probar esa experiencia. Así que le propuse a mi mujer realizar nosotros mismos un programa intensivo de 3 semanas en casa en las siguientes navidades.

Como siempre, también valoramos las ventajas e inconvenientes de realizar el programa en casa:

Ventajas

- Realizar una rehabilitación intensiva de la mano durante 3 semanas con una restricción total. Ya eramos especialistas en terapia restrictiva, y teníamos los conocimientos y experiencia suficientes para poder realizarlo nosotros mismos en casa. Es más, creo que hay muy poca gente que tenga tanta experiencia en esta especialidad como nosotros.
- Hacer la rehabilitación en un entorno familiar, e incluso incorporar a su hermano en los juegos y actividades.
- El poco tiempo libre de ocio que quedase, sería un tiempo de ocio de calidad, con su hermano, sus juguetes, su familia.
- Ninguna dificultad para organizarlo con nuestros trabajos al elegir nosotros las fechas que mejor nos convienen.
- El dinero. Es coste es prácticamente nulo. Si acaso comprar algún juguete especifico mas, pero nosotros ya tenemos todo tipo de material.

Inconvenientes

- El mayor inconveniente era como casi siempre la presión familiar. Las navidades era el mejor momento para que el niño casi no perdiese colegio, y por la organización con nuestros trabajos, pero son unas fechas en las que hay muchas celebraciones familiares que deberíamos sacrificar y provocaría muchas tensiones.

- El cansancio de realizar nosotros mismos la terapia durante 3 semanas sin salir casi de casa. Aunque la preparación de un viaje, y las incomodidades de vivir en una habitación compartida en Nueva York (preparar comidas, lavar ropa, duchas, etc), también provoca igual cansancio o mas.

- No ayudar a la investigación de una universidad, y conseguir una mayor difusión de nuestra experiencia. Pero bueno, al publicar toda nuestra experiencia en nuestro blog, minimizamos un poco este inconveniente.

Para nosotros el programa en casa tenía mas ventajas que inconvenientes. En nuestro caso, casi siempre, nuestro mayor inconveniente está en la familia. En la presión y los chantajes emocionales a los que nos someten. Cuando decidimos hacer el programa en casa, nuestros mayores temores era como decírselo a la familia, y como se lo iban a tomar. Yo estaba realmente estresado por como decírselo.
Probablemente si hubiésemos decidido ir en navidades a un programa intensivo en Nueva York, faltando a todas las celebraciones familiares, lo hubiesen entendido. Pero si decidimos hacer ese mismo programa en casa, no lo entienden. A pesar de todo, decidimos hacerlo.
 
 

FAMILIA

 

FAMILIA

Este blog va dirigido especialmente a los padres novatos que empiezan en este mundo de la hemiparesia y la rehabilitación. Espero que les pueda servir de algo de ayuda o información nuestra experiencia, y espero que consigan que sus relaciones con sus familias sean buenas.
El apoyo de la familia es muy importante para tener un equilibrio mental y emocional. Sin ese apoyo se sufre mucho.

En nuestra caso, mi relación con nuestra familia no es buena, no se si por culpa de ellos o por culpa mía por una mala gestión de las relaciones personales, pero el caso es que la relación con nuestros padres y hermanos no es como nos gustaría que fuese.

Conozco bastantes casos de matrimonios con hijos con parálisis cerebral que se han divorciado. Normalmente porque el marido no es capaz de aguantar la presión y la exigencia que lleva esta vida. En nuestro caso, creo que nuestro matrimonio se ha reforzado por tener un hijo especial, pero la relación con nuestra familia se ha debilitado mucho por la presión, y en ocasiones casi roto.

En una ocasión, tratando de explicar a un familiar lejano que le gustan mucho los toros nuestra situación familiar, le puse un ejemplo taurino. Tener un hijo con hemiparesia y hacer tu mismo una rehabilitación intensiva en casa todos los días, es como si fueses torero y tuvieses que torear tu solo 6 toros todos los días. Eso por si solo ya es muy cansado y estresante, pero si encima el público de la plaza te está abucheando, es casi misión imposible que lo consigas hacer o que no termines loco. Para eso prefiero que no haya público en la plaza.

Es cierto que yo elegí hacer un sistema de rehabilitación muy intensiva en casa, que la verdad no es lo habitual. Nuestra familia nunca ha aceptado nuestro nivel de exigencia ni nuestra forma de vivir. Incluso, es cierto que hasta mi mujer los dos primeros años no lo veía claro porque toda nuestra familia estaba en contra, y le entraban dudas. Y porque “lo normal” era ir dos o tres veces a un fisioterapeuta a la semana y el resto del tiempo intentar vivir una vida normal.

Afortunadamente mi mujer con el paso del tiempo, y viendo los resultados mejores que la media que hemos ido teniendo, tiene una mente flexible, y cambió su forma de pensar. Si no hubiese dado resultados yo también soy lo suficientemente flexible, y habría cambiado mi estrategia de rehabilitación. Pero nuestra familia no ha cambiado su forma de pensar acerca de nuestra vida y como deberíamos llevar la rehabilitación.

Durante estos casi 8 años que llevamos de rehabilitación hemos hablado con ellos para tratar de explicarles que hemos elegido hacer una rehabilitación muy intensiva en casa porque pensamos que es lo mejor para nuestro hijo. Y que eso nos condiciona mucho nuestra vida, y nuestro tiempo libre que prácticamente no tenemos. Pero a pesar de haber hablado bastante veces con ellos y de incluso haberles escrito alguna carta, no lo entienden ni aceptan.

Mis suegros piensan que haciendo una rehabilitación menos intensiva conseguiríamos unos resultados parecidos. Ya lo sabemos. Las mayores ganancias de la rehabilitación se consiguen al principio. Luego para conseguir pequeñas cosas, casi inapreciables para no especialistas, hay que hacer muchísimo mas trabajo. Pero la decisión de si ese gran esfuerzo y trabajo para conseguir pequeños avances merece la pena, creo que corresponde a los padres, no a los abuelos. Y para nosotros si merece la pena. Aunque conocemos otros padres con niños con hemiparesia que no opinan igual.
Mis suegros no aceptan el camino que hemos elegido, y su actitud y energía hacia mi no es buena.

Por ejemplo nuestro hijo hay parte del tiempo de juego libre que tiene que lo hace con un guante restrictivo en la mano no afectada, para que ejercite la mano izquierda. Usamos esto en juegos de mesa, con cochecitos, para pintar, etc. En actividades que puede hacer solo con una mano.
Al principio intentábamos que los abuelos participasen de estas actividades, y así los abuelos podían ver mas tiempo a los niños, los niños jugaban y tenían tiempo libre, y se hacía rehabilitación.

Pues fue imposible. Mis suegros rechazan la terapia restrictiva, y esa energía se la transmitían al niño. Incluso en una ocasión, hace años, yo me fui un momento a la cocina y al volver mi suegra le había quitado el guante restrictivo a mi hijo porque “pobrecito” le molesta. Al final detectamos que el niño tenía rechazo al guante restrictivo en su presencia, y decidimos no ponérselo cuando estaban ellos.
Hay que aclarar que mi hijo no tiene ningún tipo de rechazo a la terapia restrictiva si estamos solos en casa.

Mis padres nos han presionado muchísimo para que asistamos a reuniones familiares, aun sabiendo que estábamos muy limitados de tiempo. Para nosotros es obligatorio que nuestro hijo duerma la siesta. Es una terapia médica para nosotros. No es opcional.

Después de hacer 3 o 4 horas de rehabilitación intensiva un sábado por la mañana, mi hijo necesita descansar. Además aunque no hiciésemos tantas horas, como actualmente en agosto del 2016, que ya solo hacemos unas 1,5-2 horas al día, tenemos comprobado que su cerebro necesita descansar. Cuando está excesivamente cansado, cojea mas, sus disfluencias verbales son mayores, en definitiva sus patrones patológicos empeoran. Un niño “normal” puede estar desde las 8 de la mañana hasta las 11 de la noche activo sin parar, y lo único que pasará es que acabara el día muy cansado y dormirá esa noche muchísimo. En el caso de los niños con hemiparesia, los patrones patológicos con mucho cansancio aumentan muchísimo, incluso aumentan el riesgo de caídas o golpes.

Nosotros eso lo podemos hacer algún día al año de forma muy excepcional por alguna ocasión muy especial. Pero no 2, 3 o 4 veces al mes que es lo ellos quieren.
A pesar de habérselo explicado muchísimas veces, que no podemos ir a comer, que si hay reunión familiar como muy pronto podríamos llegar a las 4 o 5 de la tarde, nunca lo han entendido ni aceptado. Piensan que lo hacemos porque queremos echarnos siesta y que podríamos ir a comer si quisiéramos.

Mis padres y mi hermana siguen organizando comidas para las reuniones familiares. En 8 años que llevamos de rehabilitación nunca han aceptado cambiar una comida por una merienda-cena. Ha habido alguna ocasión en algún cumpleaños en la que ni nos han esperado para que mis hijos pudiesen soplar las velas con todo el mundo. Hemos llegado a las 4:30 de la tarde y habían soplado las velas a las 4:00. En otra ocasión, después de mucho correr llegamos a las 5 de la tarde y todo el mundo se fue a las 6 porque tenían otras cosas que hacer. Lo normal en mi familia es comer y pasar toda la tarde juntos hasta la noche. En otra ocasión, supe que iba a pasar algo parecido y que se iban a ir muy pronto, y les dije que entonces casi mejor nos veíamos otro día mas tranquilamente que tuviésemos todos mas tiempo. Mi madre me llamo a gritos amenazándome que no me iba a volver a hablar en la vida, que tenia que ir, etc.

En 8 años son muchas las anécdotas y detalles que se podrían contar además de los comentarios presionantes que nos hacían continuamente sobre por que llegábamos tarde. A mi personalmente ya me da igual la verdad, pero si sufro por mis hijos. Ya empiezan a ser mayores y se dan cuenta de todos esos detalles.

Otro punto de conflicto últimamente es que exigen mas tiempo para ver a sus nietos. Si, es una exigencia. Desde hace unos dos años hemos relajado un poco la rehabilitación porque decidimos que mi hijo necesitaba mas tiempo de ocio con otros niños para relacionarse socialmente y conseguir una estabilidad emocional. Marcamos como orden de prioridades: rehabilitación, sociabilización con otros niños, familia, nuestro ocio personal de mi mujer y mío (este actualmente todavía casi no existe, no hay tiempo). Eso suponía ver a los abuelos cada 7-15 días. Mis padres tampoco lo aceptaron. Decían que si los amigos estaban antes que la familia. Ellos exigen estar con los niños una o dos veces a la semana. Nuevo conflicto.

Además a esto hay que unir que mi padre no quiso venir a nuestra boda, y el resto de abuelos dijeron que para casarnos de la forma que habíamos pensado, mejor lo hiciésemos solos sin decírselo a nadie. Y también que mis padres apoyan a mis suegros en la relación tensa que tenemos sobre el modo de llevar la rehabilitación. Se han puesto de su parte y no de la mía.

Muchas veces me pregunto si yo ante la situación contraria, no sería capaz de cambiar una comida por una merienda. Mi mujer me dice que yo igual tampoco lo haría porque no pensaría como pienso ahora, no estaría hipersensibilizado. Según ella, ellos no viven con la rehabilitación y la hemiparesia las 24 horas del día. Para ellos es algo totalmente secundario que no forma parte de sus vidas y por lo tanto no le dan esa importancia.
Puede ser, y en el caso de mi hermana hasta lo puedo entender, porque ya cada uno tiene sus vidas, sus hijos, sus preocupaciones, y no a estar pendiente de nuestras necesidades o deseos. Es entendible.

Pero en el caso de los abuelos, lo siento, pero me cuesta mucho aceptarlo y entenderlo. Yo creo que no actuaria así.
También he pensado que si toda mi familia cercana está en mi contra, igual yo estoy equivocado. Pero cada vez que vamos a fisios o médicos nos reafirman en que nuestra rehabilitación está siendo buena. Y para mi eso es lo que cuenta. Además mi mujer, que antes pensaba como ellos, también me reafirma en que seguimos el camino correcto.
Estos son mis apoyos para seguir adelante con las fuerzas necesarias y tener una mínima estabilidad mental y emocional.

Pero reconozco que sufro y he sufrido mucho, llegando casi a un principio de depresión. He aguantado y aguanto por mi hijo. No me puedo permitir el lujo de caer en una depresión. Aunque no es fácil de aceptar que tu familia no te apoya en lo mas importante en la vida que hay para ti. Me está costando muchísimo aceptarlo, y no se si lo lograré.

Aunque he tenido pensamientos de romper totalmente todas las relaciones con la familia, creo que eso aún me haría mas daño y no lo podría superar. Sería peor el remedio que la enfermedad. De momento he decidido mantener una relaciones educadas y cordiales, aunque no excesivamente cercanas. He delegado todo tipo de negociación familiar en mi mujer que tiene un talante mas amable y conciliador.

Para los padres que estáis empezando en este mundo de la rehabilitación, os deseo que sepáis gestionar este tipo de relaciones mejor que yo. Os va a tocar vivir un camino muy difícil, que sin el apoyo familiar se hace muchísimo mas difícil aun. Mucha suerte en ello.
 

RUTINAS AÑO 2015

 

RUTINAS AÑO 2015
 
Durante el año 2015, mi hijo tenía 7 años, y nuestras horas de rehabilitación semanales en casa eran unas 12-15 horas repartidas en unas 6 o 7 sesiones de 2 horas o 1 hora y media cada sesión.
Solíamos hacer una sesión de fisioterapia un día (estiramientos, pilates, trabajo en camilla), y el día siguiente una sesión de estiramientos y cinta de andar. También hacemos siempre unos 20 minutos de estiramientos nocturnos antes de acostarse.
Siempre dedicábamos una tarde libre a ocio, y muchos fines de semana dos tardes. En total unas 6-7 tardes libres al mes.
Además de esto, intentábamos hacer 2 o 3 mañanas de bicicleta al mes, patines, jugar a la playstation o móviles 3-4 horas al mes para ejercitar la bimanualidad.
También seguíamos haciendo la terapia restrictiva pero ya integrándolas siempre con actividades cotidianas: siempre come con la mano izquierda, siempre hace los deberes en casa con la mano izquierda, juego libre con terapia restrictiva, juegos de mesa, etc.

TERAPIA BIMANUAL CON VIDEOJUEGOS

 

TERAPIA BIMANUAL CON VIDEOJUEGOS

Siempre he tenido claro que deberíamos trabajar con videojuegos porque forman parte imprescindible para la correcta integración social con otros niños. Hay que entrenar a mi hijo con los videojuegos en casa, para que adquiera un nivel suficiente de juego con el que sea capaz de competir casi en igualdad de condiciones con otros niños.
 
Desde que tenía unos tres años practicábamos a veces con juegos fáciles en el teléfono móvil. Tiene que ser un teléfono pequeño para que se adapte a las dimensiones de su mano y tenga un posición correcta al coger el teléfono.
Empezamos con un juego muy fácil de una bicicleta en el que la mano derecha era para acelerar y la izquierda para saltar obstáculos. Hay que seleccionar el juego correcto para que sea la mano afectada la que mas se ejercite. Con este juego practicábamos la coordinación bimanual.
 
Mas adelante, pusimos algún otro juego para variar la dificultad, y cuando el niño tenía casi 6 años me instalé en el teléfono móvil un emulador de la antigua GameBoy advanced, para la que hay cientos de juegos. Como siempre, hay que seleccionar el juego adecuado, no vale cualquiera. Ahora que mi hijo casi va a cumplir 8 años vamos a cambiar el teléfono a uno un poco mayor para que se adapte mejor al tamaño de su mano. El anterior ya casi se queda pequeño. Los niños juegan al teléfono principalmente en los viajes en coche, o en momentos de espera de médicos, etc. Aprovechamos así también esos momentos perdidos para hacer un trabajo de rehabilitación.

Hoy en día hay muchos niños que pasan demasiado tiempo con videojuegos, y no estoy muy de acuerdo con eso. Pero en el caso de nuestros hijos creo que puede ser una herramienta muy válida de rehabilitación. Después de que estuvimos varios años practicando con los teléfonos móviles y mi hijo ya tenía bastante habilidad con ellos, en el verano de 2015 decidimos comprar una playstation 2. 
 
En ese momento ya existía la playstation 4 por unos 400 euros, pero la playstation 2 de segunda mano, con mandos y varios juegos nos costó unos 50 euros. Y para mis hijos de 7 y 5 años, y para lo que nosotros la queríamos la playstation 2 era mas que suficiente. Era el momento adecuado también porque las manos del niño tenían el tamaño adecuado para coger este tipo de mandos de una forma correcta. Antes lo intentamos, pero la postura con que cogía el mando no era la correcta porque el mando era demasiado grande para su mano. Jugamos a la playstation unas 4-5 horas al mes repartidas en 2 o 3 sesiones.
 
En junio de 2016 puedo decir que mi hijo juega de forma bimanual al teléfono móvil o a la playstation en igualdad de condiciones que los otros niños y prácticamente sin ningún patrón incorrecto.