El objetivo de este blog dar a conocer nuestra experiencia como padres de un niño que nació con una hemiparesia izquierda, por si puede ayudar a otros padres que pasen por la misma situación.
En el blog vamos contando las distintas terapias que hemos aplicado a nuestro hijo, y que creemos que pueden ser de interés para otros niños.
En la parte izquierda del blog están las páginas del blog, en las que vamos contando toda nuestra historia clasificada según la edad que iba teniendo el niño. Todos los nuevos Artículos, además de estar en la página "Artículos Recientes", también los copiamos en las páginas clasificadas según la edad, para que quede de una forma mas ordenada en función de la edad del niño.

jueves, 17 de marzo de 2022

ASPECTOS PSICOLÓGICOS: ACEPTACIÓN DE NUESTRA REALIDAD

 ASPECTOS PSICOLÓGICOS: ACEPTACIÓN DE NUESTRA REALIDAD


Cuando vas a tener un hijo tu vida cambia, y aunque no lo pienses, inconscientemente te vas preparando para esa nueva situación. Probablemente ya no tendrás tanto tiempo para salir con los amigos de fiesta, tus vacaciones estarán diseñadas en función de los niños, quedarás con otros padres en el parque para que jueguen, los abuelos os visitarán o vosotros iréis a sus casas para que vean a sus nietos, etc. En fin, lo esperado cuando formas una familia. Lo mismo que han hecho tus familiares y amigos que han tenido hijos antes que tu.
Pero cuando te enteras que tu hijo tiene parálisis cerebral del tipo que sea, tu vida cambia.
Hay padres que se resignan con la situación e intentan llevar la vida de una familia “normal”. No comparto esta idea, pero la respeto porque cada familia y situación tiene sus circunstancias particulares y sus creencias, y cada padre es el principal responsable de la rehabilitación de su hijo, y por lo tanto es libre de orientarla como mejor crea.
En nuestro caso, como ya hemos explicado otras veces en este blog, hemos decidido luchar con toda nuestra energía, tiempo y dinero, e intensificar la rehabilitación al máximo posible, sobre todo los primeros años de vida del niño. Esto condiciona toda nuestra vida, y por lo tanto, ya no tenemos la vida de una familia “normal” como inconscientemente esperábamos.
Creo que a la mayoría de padres nos cuesta aceptar esta realidad, y es a lo largo del tiempo, según van pasando los años cuando vamos interiorizando nuestra situación, y aceptando nuestras rutinas de trabajo y que nuestra vida va a ser distinta.
Esa realidad distinta significa que todas nuestras energías y pensamientos van dirigidas a la rehabilitación.
Nuestros trabajos, nuestro ocio, nuestras relaciones familiares y amistades, etc, todo pasa a un segundo plano. Estamos convencidos que es la forma de conseguir la mejor rehabilitación posible para nuestro hijo.
Creo que la mayoría de las personas, y dependiendo de la etapa de su vida, centran sus energías, sus pensamientos y la mayoría de su tiempo en una o dos cosas principalmente. Cuando eres joven, te centras en estudiar y los amigos. Mas adelante en el amor y en trabajar.
Cuando ya tienes familia, hay muchos casos, hay padres que se centran mucho en el trabajo y la familia queda en un segundo plano. Hay madres que se centran en la familia y el trabajo queda en segundo plano. Empresarios que gastan la mayoría de sus energías en su empresa. Incluso gente que tiene amantes y esto también le consume mucha parte de su energía y tiempo.
En mi opinión, los padres con hijos con parálisis cerebral debemos de centrar casi toda nuestra energía en la rehabilitación, y lo poco que nos sobre para la familia, el trabajo y el resto.
Si tu estás 24 horas al día pensando como hacerle mejor los ejercicios a tu hijo, si te despiertas por la noche a las 5 de la madrugada porque se te ha ocurrido una idea para mejorar algún ejercicio, si trabajas diariamente con tu hijo. En definitiva, si tienes esa implicación y dedicas toda tu energía a ello, probablemente conseguirás una rehabilitación mucho mejor que la media.
Pagarás un alto precio: cansancio, desgaste, enfrentamientos con la familia, discusiones, casi dejarás de tener vida social, tu vida profesional se verá truncada, etc, pero desde mi punto de vista merece la pena pagar ese precio, porque los resultados son mucho mejores que haciendo una rehabilitación tradicional, y la conciencia estará tranquila porque estás haciendo todo lo posible por tu hijo, llegando al límite de tus energías.
Esa es la realidad que tenemos que aceptar, es mas un difícil proceso psicológico, que físico, de echar muchas horas de trabajo de rehabilitación, que también hay que hacerlo.
Los fisioterapeutas tienen la parte física de hacer muchas horas de rehabilitación, pero no tienen esa parte psicológica que tenemos que soportar los padres.